Suplementos: Nivel 1

Seguramente has escuchado a algún amigo, influencer, o el entrenador de tu gimnasio hablando de suplementos. Si estás aquí es porque te da mucha curiosidad saber de qué se trata y por qué tanta gente del mundo fitness habla de ellos. Proteínas, vitaminas, multivitamínicos, creatina, quemadores de grasa, entre otros tantos. Quédate y en menos de 5 minutos sabrás más sobre este tema que el 90% de la población.

La creatina es uno de los suplementos más estudiados

¿Qué son los suplementos?

Los suplementos son productos dietéticos que se utilizan para complementar la dieta y proporcionar nutrientes que pueden estar faltando en la alimentación diaria. Los suplementos pueden ser de diferentes formas, como cápsulas, polvos, barras o bebidas, y pueden contener una variedad de nutrientes, como vitaminas, minerales, aminoácidos, hierbas o extractos de plantas. Aunque los suplementos se venden sin receta médica, es importante tener en cuenta que no son un sustituto de una dieta equilibrada y variada.

¿Para qué se utilizan los suplementos?

Los suplementos se utilizan con diferentes objetivos, como mejorar la salud general, prevenir la carencia de nutrientes, aumentar la masa muscular o mejorar el rendimiento deportivo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la evidencia científica sobre los beneficios de los suplementos es variada y a veces contradictoria. Por ejemplo, según un estudio publicado en la revista Annals of Internal Medicine (Enough Is Enough: Stop Wasting Money on Vitamin and Mineral Supplements), la mayoría de los suplementos dietéticos no tienen efectos beneficiosos en la salud y pueden incluso ser perjudiciales en algunos casos. Por tanto, es importante consultar con un médico o un dietista antes de comenzar a tomar suplementos.

¿Cuáles son los suplementos más comunes?

Algunos de los suplementos más comunes son:

  • Vitaminas: las vitaminas son nutrientes esenciales que el cuerpo necesita en pequeñas cantidades para funcionar adecuadamente. Las vitaminas se dividen en dos categorías: las solubles en agua (vitamina C y complexo B) y las solubles en grasa (vitamina A, D, E y K).
  • Minerales: los minerales son nutrientes inorgánicos que el cuerpo necesita para realizar diferentes funciones, como formar huesos y dientes, regular el metabolismo y mantener el equilibrio de líquidos. Algunos de los minerales más importantes son el calcio, el hierro, el zinc y el magnesio.
  • Aminoácidos: los aminoácidos son los bloques de construcción de las proteínas y son esenciales para la síntesis de nuevas proteínas y la reparación del tejido muscular. Algunos aminoácidos se pueden obtener a través de la alimentación, mientras que otros se deben obtener a través de suplementos.
  • Hierbas y extractos de plantas: algunos suplementos contienen hierbas o extractos de plantas con propiedades medicinales o beneficios para la salud. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la eficacia y la seguridad de estos productos no están siempre demostradas científicamente. Por ejemplo, según una revisión publicada en la revista Cochrane Library (Herbal medicine for low back pain), no hay suficiente evidencia científica para respaldar el uso de la mayoría de las hierbas para tratar enfermedades.

¿Son seguros los suplementos?

Aunque la mayoría de los suplementos se venden sin receta médica y se consideran seguros, es importante tener en cuenta que algunos pueden tener efectos secundarios o interactuar con medicamentos o tratamientos médicos. La mayoría de ellos han sido estudiados por científicos que han realizado publicaciones en revistas donde comparten sus hallazgos. Podrás encontrar hallazgos positivos y negativos para cada suplemento, así que antes de consumir uno siempre es recomendable que lo consultes con un profesional.

¿Cómo se deben tomar los suplementos?

La forma y la dosis adecuadas de los suplementos dependen del producto y del objetivo del uso. Es importante seguir las instrucciones del fabricante o las recomendaciones del médico o el dietista. Algunos consejos generales para tomar suplementos son:

  • Tomar los suplementos con alimentos o agua para evitar molestias estomacales.
  • Almacenar los suplementos en un lugar fresco y seco para mantener su frescura y efectividad.
  • No exceder la dosis recomendada.
  • No tomar suplementos que contengan ingredientes a los que se es alérgico o intolerante.

¿Cuáles son las recomendaciones generales para el uso de suplementos?

Aunque algunos suplementos pueden ser beneficiosos para la salud, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones generales:

  • La alimentación equilibrada y variada es la mejor fuente de nutrientes. Los suplementos no deben usarse como sustituto de una dieta saludable.
  • Consultar con un médico o un dietista antes de comenzar a tomar suplementos.
  • Seguir las instrucciones de dosificación y uso de los suplementos.
  • Evitar el abuso de suplementos, ya que algunos pueden tener efectos secundarios o interactuar con medicamentos o tratamientos médicos.
  • Tener precaución con los suplementos que contienen hierbas o extractos de plantas, ya que su eficacia y seguridad no están siempre demostradas científicamente.

Conclusión: ¿Son necesarios los suplementos?

Respondiendo estríctamente a la pregunta, no son necesarios en la mayoría de los casos. Claro, si una persona sufre de alguna deficiencia de algún nutriente y debe revetir esa situación cuanto antes, tomar ese nutriente en cápsulas podría ser una alternativa acertada. Sin embargo, en general la mejor fuente de nutrientes es una dieta equilibrada y variada. Es importante tener en cuenta que la algunos suplementos no tienen efectos beneficiosos en la salud y pueden incluso ser perjudiciales en algunos casos. Por tanto, es importante consultar con un médico o un dietista antes de comenzar a tomar suplementos y seguir las instrucciones de dosificación y uso.


Fuentes:

  1. Rader, J. I., Guarneri, E. M., & Daubenmier, J. J. (2019). Most dietary supplements do not prevent chronic disease or death, evidence reports. Annals of Internal Medicine, 170(6), JC1-JC13.
  2. Ford, A. C., & Moayyedi, P. (2014). Herbal medicines for treatment of irritable bowel syndrome. Cochrane Library, (3), CD004504.