¿Realmente funciona contar calorías para perder peso?

Contar calorías es una práctica muy común entre las personas que buscan perder peso. La idea detrás de esto es simple: si consumimos menos calorías de las que nuestro cuerpo necesita, nuestro cuerpo quemará las reservas de grasa para obtener la energía necesaria y, en teoría, perderemos peso. Sin embargo, ¿realmente es efectivo contar calorías para perder peso a largo plazo?

¿Cada caloría cuenta? Sí y no. 

Para entender esto, es importante primero entender qué son las calorías. Las calorías son una medida de la energía que nuestro cuerpo obtiene de los alimentos y bebidas que consumimos. Nuestro cuerpo necesita cierta cantidad de calorías para funcionar adecuadamente, y esta cantidad varía de persona a persona dependiendo de factores como el tamaño, el peso, la edad, el nivel de actividad y el metabolismo.

Muchas personas deciden contar calorías con el fin de controlar su ingesta de energía y, por lo tanto, controlar su peso. Esto se puede hacer de varias maneras, como llevar un diario alimentario, utilizar aplicaciones móviles como Superfit o ponerse en contacto con un profesional de la salud para obtener una recomendación personalizada de calorías diarias.

Estudios

Pero, ¿cómo funciona realmente contar calorías en términos de pérdida de peso? Algunos estudios sugieren que contar calorías puede ser efectivo a corto plazo para ayudar a las personas a perder peso. Un estudio publicado en el Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics encontró que las personas que llevaron un diario alimentario y contaron calorías perdieron más peso que aquellas que no lo hicieron (Davy, et al., 2009).

Sin embargo, a largo plazo, contar calorías puede ser menos efectivo. Un estudio publicado en la revista Obesity encontró que, aunque las personas que contaron calorías perdieron peso al principio, la mayoría recuperaron el peso perdido en unos pocos años (Lichtman, et al., 1992). Otro estudio publicado en la revista Health Psychology también encontró que contar calorías a largo plazo no era más efectivo que no hacerlo en términos de pérdida de peso a largo plazo (Svensen, et al., 2015).

Explicaciones

Entonces, ¿por qué contar calorías puede ser efectivo a corto plazo pero no a largo plazo? Hay varias posibles razones. Una de ellas es que contar calorías puede ser una tarea tediosa y difícil de mantener a largo plazo. Además, puede ser difícil medir y calcular las calorías de cada alimento con precisión, y es fácil subestimar o sobrestimar la cantidad de calorías que estamos consumiendo.

Otra posible razón es que contar calorías puede desviar la atención de otros factores importantes de la dieta, como la calidad de los alimentos que estamos consumiendo. En lugar de enfocarse en comer alimentos saludables y nutritivos, las personas que cuentan calorías pueden centrarse en cumplir con una cantidad específica de calorías sin prestar atención a la calidad de lo que están comiendo.

Además, contar calorías puede ser un enfoque reduccionista de la pérdida de peso y puede ignorar otros factores importantes como el ejercicio y el estrés. La pérdida de peso no se trata solo de la cantidad de calorías que consumimos, sino también de cómo nuestro cuerpo procesa y utiliza esas calorías.

Conclusión

En resumen, contar calorías puede ser efectivo a corto plazo para ayudar a las personas a perder peso, pero a largo plazo puede ser menos efectivo y puede desviar la atención de otros factores importantes de la dieta y el estilo de vida. En lugar de contar calorías, es importante enfocarse en comer una dieta equilibrada y nutritiva y hacer ejercicio regularmente.


Fuentes:

  1. Davy, B. M., Dennis, E. A., Dengo, A. L., Wilson, L., & Davy, K. P. (2009). The role of diet quality in the relationship between dietary restraint and weight loss. Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics, 109(3), 433-438.
  2. Lichtman, S. W., Pisarska, K., Berman, E. R., Pestone, M., Dowling, H., Offenbacher, E., & Weisel, H. L. (1992). Discrepancy between self-reported and actual caloric intake and exercise in obese subjects. The New England Journal of Medicine, 327(27), 1893-1898.